LA POBLACION DE LA ARGENTINA
La población de la Argentina
En el último Censo Nacional de Población realizado en 2001 se registraron 36.260.130 de habitantes. Para el 2006 se estimaba que en el territorio argentino habitaban alrededor de 38 millones de personas.
Crecimiento moderado
El crecimiento natural o vegetativo surge de la diferencia entre los nacimientos y las defunciones; a ese resultado se le suma o resta el saldo migratorio (...
El crecimiento de la población de la Argentina es moderado (entre el 1 y 1,2%) en comparación con la población de otros países. Por ejemplo, es más bajo que el de numerosos países africanos (entre el 2 y el 3%), pero más alto que el de la mayoría de los países europeos (entre el 0 y el 1%). Ese crecimiento se produce, de modo fundamental, debido al crecimiento vegetativo; es decir, a la diferencia entre la natalidad (conjunto de nacimientos) y la mortalidad (conjunto de defunciones). Las migraciones internacionales, que son el otro componente de la ecuación demográfica, tienen escasa relevancia en el crecimiento de la población.
La población total del país muestra las tendencias demográficas de gran parte de los países del mundo, especialmente de los más desarrollados: descenso de la natalidad, de la mortalidad y de la fecundidad; envejecimiento de la población y aumento de la esperanza de vida.
La Argentina es uno de los países de América latina que más tempranamente ingresó en la etapa final de la transición demográfica. El descenso de la natalidad está vinculado, entre otros aspectos, con el proceso de descenso de la fecundidad y la disminución del aporte migratorio. La declinación general de la mortalidad se debe, como en otros países, a las mejoras en las condiciones generales de salud de una gran parte de la población.
Cambios demográficos
Si se hubieran mantenido las altas tasas de crecimiento de principios del siglo XX (cuando se produce la llegada en masa de inmigrantes europeos), actualme...
Las características demográficas de la población argentina han cambiado con el transcurso del tiempo; tanto en lo que hace al ritmo de crecimiento como a su composición por edades, de varones y mujeres, de nativos y no nativos.
Las más altas tasas de crecimiento se registraron hacia fines del siglo XIX y principios del siglo XX; esto se debió, en gran medida, a que en esa época llegó una importante oleada de inmigrantes (especialmente de Europa) constituida en gran parte por jóvenes y adultos, y en su mayoría varones. Además, en esa época se registraban en la población, en general, altas tasas de natalidad (entre el 40 y el 50 por mil).
El censo de 1914 registró el mayor porcentaje de población extranjera (alrededor del 30% de no nativos) y la composición de la población mostraba un predominio de varones sobre las mujeres. A partir de entonces fue disminuyendo el aporte de la población inmigrante y también descendieron las tasas de natalidad y de fecundidad. En estos dos últimos procesos también influyó el proceso de urbanización de la población (aumento de la población urbana respecto de la rural) porque las mujeres con residencia urbana tendieron a tener un menor número de hijos. La baja en las tasas de fecundidad también se vincula, en gran medida, con el aumento de la participación de la mujer en el mercado de trabajo y la adopción de mayores niveles de educación, la conformación de matrimonios en edades más avanzadas y la adopción de métodos de planificación familiar.
En la actualidad, y sobre la base de los datos del último Censo Nacional de Población realizado en 2001, entre los aspectos sobresalientes de la estructura demográfica de la población argentina se destacan:
- El aumento de la proporción de personas con 65 años y más que se identifica como "adultos mayores" o "personas de la tercera edad": representaban el 9,9% del total de la población.
- El predominio de la población femenina: se registraron 105 mujeres por cada 100 varones. Este índice es superior en los grupos de edad avanzada (146 mujeres por cada 100 varones).
- Una muy baja proporción de extranjeros: sólo el 4,2% de la población total censada en el país es no nativa.
Envejecimiento demográfico
Como ocurre en otros países, en la Argentina se presenta un proceso de cambio en la estructura por edad de la población, caracterizado por el aumento en la proporción de personas adultas mayores (de más de 65 años) y la disminución de la que corresponde al grupo de niños y jóvenes (de 0 a 14 años). Entre el segundo Censo de Población (1895) y el último (2001), el porcentaje de personas de 65 años y más de la población total pasó del 2,5% al 9,9%.
Desde 1956, la Organización de las Naciones Unidas caracteriza a las poblaciones, según la proporción del grupo de edades, de la siguiente manera:
Sociedad joven: aquella que tiene menos de un 4% de adultos mayores.
Sociedad madura: aquella que tiene entre un 4 y un 6,9% de adultos mayores.
Sociedad envejecida: aquella que supera el 7% de adultos mayores.
Para los demógrafos, en la Argentina la población envejece, no sólo por el porcentaje que representa la tercera edad sino por su ininterrumpido aumento. Entre los factores que más han influido en este envejecimiento se destaca la caída sostenida de la fecundidad, que menguó el aporte de población joven. En menor medida esto también se debe a la disminución de la mortalidad.
Diferencias demográficas
* Cantidad de hombres por cada 100 mujeres. (1) Es alta por la mayor proporción del grupo de más de 65 años.
Para establecer las características demográficas actuales de la población total del país se hace un promedio de los valores de cada localidad o jurisdicción (sea una ciudad, un partido o departamento, o una provincia). Si se tienen en cuenta otros agrupamientos de población (por ejemplo, la población de las provincias, de zonas rurales o urbanas o de sectores socioeconómicos), se pueden encontrar diferencias respecto de las características de la población total del país. Por ejemplo, la provincia de Santa Cruz es la que presenta el mayor porcentaje de población extranjera (el 12%); en algunas jurisdicciones la fecundidad es más alta (entre 2 y 4 hijos en Misiones y Catamarca) y, en otras, más baja (entre 1 y 2 hijos en la Ciudad de Buenos Aires).